Disertación

¿Qué es una disertación?

Una disertación, también conocida como composición en algunos países como Francia, es un escrito o una exposición argumentativa que busca responder una pregunta o proponer un planteamiento. En el mundo hispanohablante, se entiende por disertación una exposición oral de una sola persona frente a un pequeño público o auditorio, teniendo como herramientas de apoyo medios visuales, gráficos o sonoros. Este último caso se puede encontrar en la enseñanza primaria, secundaria, técnica, universitaria e incluso posgradual. Por fuera de la universidad, también se catalogan como disertaciones las exposiciones informativas.

En los países anglosajones, el concepto de disertación hace referencia a la tesis universitaria. En este caso, la disertación parte de unas teorías que paulatinamente se convierten en una tesis final. Así, la dissertation es una tesis o trabajo de entre 50 y 150 páginas que busca recopilar los años de investigación y trabajo que ha realizado el estudiante universitario. En estos países, la disertación es reemplazada en las escuelas y colegios por debates, ensayos, notas críticas y resúmenes de las lectura o temas vistos en clase.

Mientras tanto, en los países francófonos la disertación es un ejercicio propio de las escuelas, en el cual los estudiantes sostienen una hipótesis para llegar, por medio de argumentos, a una teoría o una definición. Este ejercicio surgió en el siglo XVII y reemplazó a la antigua disputatio, también conocida como disputa medieval, en donde se realizaba un debate oral de las tesis presentadas por los estudiantes. La disertación más tarde reemplazó al discurso en la educación media con la llamada reforma de Gustave Lanson de 1885, que suprimió la enseñanza de la retórica. Antes de ello, la disertación filosófica era empleada en liceos e institutos desde 1864.

¿Cuáles son las características de las disertaciones?

Las principales características de una disertación son:

• Elaboración de un planteamiento, hipótesis u opinión sobre un tema específico.
• Argumentación coherente y clara del punto de vista sobre el tema específico.
• Exposición oral de los argumentos ante un público.
• Estructura básica conformada por una introducción o presentación, argumentación y conclusión.
• Oralidad del discurso, pues este no se expone de forma solemne o leyendo un texto, sino que pretende ganar la empatía del público.
• Planteamiento de preguntas secundarias.

¿Cuáles es la estructura de las disertaciones?

En muchos casos, se ha señalado que la disertación tiene una estructura muy rígida que impide al expositor tener la libertad que le dan otras formas de argumentación oral. Dicha estructura consiste, a rasgos generales, en los siguientes puntos:

• Entrada: es el momento en el cual el expositor presenta el tema o problema a resolver de su disertación ante el público. En este caso, la presentación usualmente parte de una definición o una serie de definiciones con el fin de que las personas sepan de qué se hablará; aunque también es usual que se comience con una pregunta, que buscará ser resulta con una hipótesis. Por su parte, el expositor debe despertar la curiosidad y la empatía de su público, por lo cual puede recurrir a anécdotas u otras estrategias.
• Exposición: es el momento en el cual el expositor presenta la forma en la que piensa abordar el tema, es decir, su metodología, enfoque o forma que tendrá la disertación. Esto ocurre después de que se haya planteado el problema a abordar.
• Desarrollo: es el momento en el cual el expositor describe sus argumentos y los ejemplos que tiene a la mano para guiar y convencer al público de su punto de vista. Como una estrategia para ganarse la empatía, algunos autores recomiendan que se les hagan preguntas a los espectadores y que el expositor hable en segunda persona (nosotros). Por ejemplo, usar verbos como pensamos, queremos, dilucidamos, etc.
• Aspectos centrales: una vez que los argumentos han sido expuestos, no está demás destacar o volver sobre los elementos más importantes de la disertación.
• Conclusión: es el momento final de disertación, cuando el expositor descubre al público la conclusión a la que ha llegado a partir de los argumentos presentados previamente. En la mayoría de los casos, la conclusión responde a la pregunta planteada al inicio de la exposición.