¿Qué es una estrella?
Una estrella es un cuerpo celeste luminoso y masivo hecho de plasma, con una forma esferoide que se mantiene gracias a su poderosa gravedad. Esta misma provoca que otros cuerpos celestes orbiten alrededor de la estrella, como es el caso de planetas y asteroides, conformando sistemas planetarios (como nuestro Sistema Solar). A pesar de la distancia a la que se encuentran, muchas estrellas se pueden apreciar a simple vista en el cielo nocturno debido a su gran luminosidad, por lo cual han sido estudiadas desde la antigüedad; aunque la mayor parte de estas sólo pueden apreciarse con telescopios de alta potencia. Por medio de estos, los astrónomos pueden identificar la edad, metalicidad y masa de una estrella a través de su luminosidad, movimiento y espectro.
Las estrellas se forman después del colapso gravitacional de una nebulosa con materia gaseosa, principalmente hidrógeno, helio y trazas de otros elementos más pesados. Así, la materia comienza a acumularse en forma de esfera y, cuando el núcleo se vuelve muy denso, el hidrógeno comienza a convertirse en helio por medio de la fusión nuclear de la estrella, liberando energía al espacio exterior en forma de radiación electromagnética, como la luz, el calor y los rayos UV, entre otras frecuencias de radiación. Esto ocurre durante una parte de su vida, pero una vez se agota el hidrógeno, se comienzan a formar otros elementos más pesados por nucleosíntesis estelar a medida que la estrella va perdiendo su energía y ganando masa hasta que finalmente explota en una supernova. El material liberado propicia la formación de nuevas estrellas, mientras que el núcleo se vuelve un remanente estelar, pudiendo convertirse en una enana blanca, una estrella de neutrones o un agujero negro.
Para simplificar los cálculos estelares, los astrónomos utilizan como referente al Sol, la enana amarilla alrededor de la cual giran los planetas y los demás cuerpos celestes de nuestro sistema. Así, las magnitudes de la luminosidad, el radio y la masa de otras estrellas se miden con relación al sol, representado por el símbolo ⊙. Además de los sistemas planetarios como el nuestro, hay casos en los que el núcleo del sistema está conformado por estrellas binarias: un par de estrellas que orbitan mutuamente sobre un centro de masas común. Además de este caso, también pueden encontrarse estrellas variables, que son aquellas que tienen alteraciones en su luminosidad debido a actividades al interior o en el exterior de la estrella. Un ejemplo de esto es Mira, de la constelación de Cetus.
¿Cómo se clasifican las estrellas?
Las estrellas pueden clasificarse de distintas formas, aunque en la actualidad predomina el sistema de clasificación de Harvard. Este reconoce los siguientes tipos de estrellas:
- Estrellas clase O: son aquellas que tienen una temperatura igual o mayor a los 33.000 K, de color azul, una masa igual o superior a 16 Masas solares, un radio igual o superior a las 6,6 Radios solares, una luminosidad igual o superior a 30.000 Luminosidades solares, unas líneas de hidrógeno débil-media, una secuencia principal aproximada de 0.00003%, y líneas de absorción de nitrógeno, carbono, helio y oxígeno. Un ejemplo de estas estrellas es 48 Onions.
- Estrellas clase B: son aquellas que tienen una temperatura comprendida entre los 10.000 y los 33.000 K, de color blanco azulado, una masa de entre 2,1 y 16 Masas solares, un radio de entre 1,8 y 6,6 Radios solares, una luminosidad de entre 25 y 30.000 Luminosidades solares, unas líneas de hidrógeno medio, una secuencia principal de 0.13%, y líneas de absorción de helio e hidrógeno. Un ejemplo de estas estrellas es Rigel.
- Estrellas clase A: son aquellas que tienen una temperatura comprendida entre los 7.500 y los 10.000 K, de color blanco azulado, una masa de entre 1,4 y 2,1 Masas solares, un radio de entre 1,4 y 1,8 Radios solares, una luminosidad de entre 5 y 25 Luminosidades solares, unas líneas de hidrógeno fuerte, una secuencia principal de 0.6%, y líneas de absorción de helio e hidrógeno. Un ejemplo de estas estrellas es Sirio A.
- Estrellas clase F: son aquellas que tienen una temperatura comprendida entre los 6.000 y los 7.500 K, de color blanco amarillento, una masa de entre 1,04 y 1,4 Masas solares, un radio de entre 1,15 y 1,4 Radios solares, una luminosidad de entre 1,5 y 5 Luminosidades solares, unas líneas de hidrógeno medio, una secuencia principal de 3%, y líneas de absorción de metales como el hierro, el calcio, el titanio, el magnesio y ele stroncio. Un ejemplo de estas estrellas es Canopus.
- Estrellas clase G: son aquellas que tienen una temperatura comprendida entre los 5.200 y los 6.000 K, de color amarillo, una masa de entre 0,8 y 1,04 Masas solares, un radio de entre 0,96 y 1,15 Radios solares, una luminosidad de entre 0,6 y 1,5 Luminosidades solares, unas líneas de hidrógeno débil, una secuencia principal de 7,6%, y líneas de absorción de calcio, helio, hidrógeno y metales. Un ejemplo de estas estrellas es el Sol.
- Estrellas clase K: son aquellas que tienen una temperatura comprendida entre los 3.700 y los 5.200 K, de color naranja, una masa de entre 0,45 y 0,8 Masas solares, un radio de entre 0,7 y 0,96 Radios solares, una luminosidad de entre 0,08 y 0,6 Luminosidades solares, unas líneas de hidrógeno muy débil, una secuencia principal de 12,1%, y líneas de absorción de metales y óxido de titanio. Un ejemplo de estas estrellas es Albireo A.
- Estrellas clase M: son aquellas que tienen una temperatura menor a los 3.700 K, de color rojo, una masa menor a las 0,45 Masas solares, un radio menor a los 0,7 Radios solares, una luminosidad menor a las 0,08 Luminosidades solares, unas líneas de hidrógeno muy débil, una secuencia principal de 76,45%, y líneas de absorción de metales y óxido de titanio. Un ejemplo de estas estrellas es Betelgeuse.
¿Cuáles son las estrellas más masivas?
Las estrellas más masivas que se conocen en la actualidad son:
- R136a1: esta estrella hipergigante azul ultramasiva cuenta con una masa 315 veces mayor a la del Sol y se encuentra en la constelación Dorado, al interior de la Gran Nube de Magallanes. Esta estrella se encuentra a unos 163.000 años luz de la Tierra.
- R136c: esta estrella cuenta con una masa 230 veces mayor a la del Sol y se encuentra en la constelación Dorado. Esta estrella se encuentra a unos 163.000 años luz de la Tierra.
- BAT99-98: esta estrella cuenta con una masa 226 veces mayor a la del Sol y se encuentra en la constelación Dorado, al interior de la nebulosa de la Tarántula. Esta estrella se encuentra a unos 165.000 años luz de la Tierra.
- R136a2: esta estrella cuenta con una masa 195 veces mayor a la del Sol y se encuentra en la constelación Dorado, al interior de la nebulosa de la Tarántula. Esta estrella se encuentra a unos 163.000 años luz de la Tierra.
- Melnick 42: esta estrella cuenta con una masa 189 veces mayor a la del Sol y se encuentra en la constelación Dorado, al interior de la nebulosa de la Tarántula. Esta estrella se encuentra a unos 163.000 años luz de la Tierra.
- R136a3: esta estrella cuenta con una masa 180 veces mayor a la del Sol y se encuentra en la constelación Dorado. Esta estrella se encuentra a unos 163.000 años luz de la Tierra.
- HD 15558 A: esta estrella cuenta con una masa 152 veces mayor a la del Sol y se encuentra en la constelación de Casiopea, al interior de la nebulosa del Corazón. Esta estrella se encuentra a unos 24.400 años luz de la Tierra.
- VFTS 682: esta estrella cuenta con una masa 150 veces mayor a la del Sol y se encuentra en la constelación Dorado, al interior de la nebulosa de la Tarántula. Esta estrella se encuentra a unos 164.000 años luz de la Tierra.
- R136a6: esta estrella cuenta con una masa 150 veces mayor a la del Sol y se encuentra en la constelación Dorado, al interior de la nebulosa de la Tarántula. Esta estrella se encuentra a unos 157.000 años luz de la Tierra.
- Melnick 34 A: esta estrella cuenta con una masa 147 veces mayor a la del Sol y se encuentra en la constelación Dorado, al interior de la nebulosa de la Tarántula. Esta estrella se encuentra a unos 163.000 años luz de la Tierra.