Lesiones, infecciones y tumores encefálicos

Las perturbaciones y lesiones que sobresaltan al encéfalo y al sistema nervioso pueden inducir a una larga serie de discapacidades mentales y físicas. Al ser el cráneo una caja cerrada, cualquier hinchazón dentro del encéfalo puede prensar estructuras, dañar tejido nervioso y provocar la pérdida de alguna función corporal o de su control. Las lesiones espinales pueden dañar los cordones nerviosos y originar pérdidas sensoriales o parálisis.

Infecciones Encefálicas

Una gran diversidad de virus, bacterias o parásitos tropicales pueden infectar el tejido encefálico o sus capas protectoras.

La infección del encéfalo, o encefalitis, puede ser una complicación rara de una infección viral como las paperas o el sarampión. Puede ser fatal, y los bebés y ancianos son quienes corren más riesgo.

• Meningitis: La inflamación de las meninges suele deberse a una infección viral o microbiana. Los síntomas iniciales pueden ser parecidos a los de una gripe, aunque a veces aparecen otros más profundos como cefalea, fiebre, náuseas y vómitos, rigidez de cuello y rechazo de la luz intensa. En los niños pequeños, los síntomas son a veces menos patentes; pueden incluir fiebre y otros signos de malestar como llantos, vómitos, diarrea, reticencia a comer y somnolencia.
• Abscesos Cerebrales: Los abscesos (acumulaciones de pus) cerebrales son raros y suelen deberse a una infección bacteriana que se ha extendido desde los tejidos próximos. El tratamiento consiste en dosis elevadas de antibióticos y eventualmente de corticosteroides para controlar la hinchazón. A veces es necesaria la cirugía para perforar el cráneo y drenar el pus. Si se tratan a tiempo, estos abscesos se curan, aunque puede haber secuelas persistentes tales como convulsiones epilépticas, dificultando el habla o la debilidad en las extremidades.

Parálisis Cerebral

Las lesiones en un cerebro inmaduro provocan alteraciones del movimiento y de la postura.

No es una enfermedad determinada, más bien es un conjunto de trastornos provocados por una lesión del cerebro en desarrollo, antes o en el transcurso del parto, o en los primeros años de vida. Los niños con parálisis cerebral no pueden controlar bien sus extremidades y posturas, pueden poseer dificultades al tragar, problemas de habla y estreñimiento crónico, no obstante, su intelecto a menudo no se ve afectado. La lesión cerebral no se aumenta, pero la discapacidad que provoca difiere según los casos al crecer el niño. Si la discapacidad es leve puede gozar una vida activa y a menudo independiente cuando son adultos.

Tumores Cerebrales

Tanto en el cerebro como en sus meninges pueden surgir tumores benignos o cancerosos.

Los tumores que se originan por primera vez en el tejido cerebral o en sus membranas se llaman primarios y pueden ser canceroso o no. Los tumores cerebrales secundarios (metástasis) son más frecuentes que los primarios y son siempre cancerosos, ya que derivan de células transportadas por el torrente sanguíneo desde tumores canceroso de áreas como mamas o pulmones. El pronóstico depende de su localización, su tamaño y su velocidad de crecimiento; suele ser para mejor los tumores no cancerígenos de crecimiento lento, y muchos de los que padecen se curan con cirugía.