Metamorfosis

¿Qué es la metamorfosis?

La metamorfosis es un proceso biológico en el que un animal sufre grandes cambios en su anatomía y fisiología durante su desarrollo como larva o cría hasta la madurez. De esta manera, durante este proceso se llevan cambios en las estructuras a partir del aumento del tamaño y del número de células, así como también se realizan cambios en la diferenciación celular. Este tipo de proceso biológico se puede encontrar como un rasgo ancestral de los cordados y está en presente en distintas especies de tunicados, crustáceos, equinodermos, anfibios, insectos, moluscos y cnidarios. Este proceso además suele estar acompañado por un cambio de comportamiento del animal y de hábitat. El término metamorfosis (μεταμόρφωσις) proviene de los vocablos griegos meta (μετα), que puede traducirse como “cambio”, y morfe (μορφή), que se puede traducir como “forma”.

En el caso de los insectos, la metamorfosis y el crecimiento están controlados por hormonas efectoras controladas en el cerebro por neurohormonas. Así, la etapa de muda y la metamorfosis son controladas por las hormonas efectoras 20-hidroxiecdisona y la hormona juvenil. La primera da inicio y coordina cada una de las mudas, regulando los cambios en los genes que tienen lugar durante la metamorfosis. En su lugar, la hormona juvenil, previene los cambios de expresión génica, con lo cual impide que las larvas se desarrollen sin que antes pasen por todas las mudas necesarias para su desarrollo. En la mayoría de los insectos voladores, las alas se obtienen después de la metamorfosis, al igual que los órganos reproductivos.

Los renacuajos, como se denominan a los individuos en estado larvario de los anfibios, solamente pueden vivir en el agua, por lo que su metamorfosis se da con el propósito de hacerlos aptos para la vida terrestre. Así, los renacuajos salen después de que los huevos son fecundados y cuentan con branquias, boca circular y cola para poder moverse en el agua. A medida que crecen, los renacuajos desarrollan sus extremidades posteriores, después sus extremidades anteriores y las glándulas dermoides. Además de esto, se reemplaza el cráneo de cartílago del renacuajo por uno óseo, ocurren modificaciones en la mandíbula y la boca, y se desarrollan los músculos de la lengua. Luego se agrandan los pulmones a medida que los arcos braquiales se degeneran, a propósito del crecimiento del cartílago y el músculo pulmonar que permitirá el bombeo de aire. También se transforma el sistema sensorial, con lo que la línea lateral se degenera para producir ojos y oídos diferenciados.

¿Cuáles son los tipos de metamorfosis?

Dentro de la biología pueden encontrarse dos formas distintas de metamorfosis, que son:

• Hemimetabolismo: también conocida como metamorfosis simple, sencilla o incompleta, es aquel proceso en el que el individuo tiene varias mudas antes de convertirse en adulto, sin dejar de alimentarse o de someterse a un proceso de inactividad. De esta manera, los estados juveniles, conocidos usualmente como ninfas, son semejantes al estado final adulto aunque más pequeños, sin madurez sexual, sin alas y, en algunos casos, con menos segmentos corporales. Este tipo de metamorfosis se puede encontrar en insectos, anélidos, moluscos, equinodermos y crustáceos. Un ejemplo de hemimetabolismo son los saltamontes y las chinches, que siendo jóvenes son como versiones reducidas de sus formas adultas.
• Holometabolismo: también conocida como metamorfosis complicada o completa, es el proceso biológico en cual nace una larva del huevo con una apariencia muy distinta de su versión adulta. Para llegar a la madurez, el individuo debe pasar por varios procesos de muda y entrar en un estado de inactividad conocido como pupa, donde finalmente crece hasta convertirse en adulto (imago). En la pupa, los jóvenes dejan de comer y se por lo general se encierran e inmovilizan en una cubierta protectora, o capullo, mientras se reorganizan morfológica y fisiológicamente. En este tipo de metamorfosis las enzimas digestivas destruyen la mayoría de las células de los órganos y los tejidos en un proceso que se conoce como histólisis. Los nutrientes que se obtiene a partir de esto se usan para construir los tejidos nuevos del adulto, en un proceso que se conoce como histogénesis. Esta metamorfosis es el proceso que llevan a cabo algunos crustáceos y el 80% de los insectos, siendo los casos más representativos las avispas, las mariposas, las moscas y los escarabajos.