Vegetación de México

¿Cómo es la vegetación mexicana?

Dada la gran extensión del territorio mexicano, que tiene costas tanto en el Océano Pacífico y el Océano Atlántico, y dada la gran diversidad de climas que tiene el país, se pueden encontrar distintos ecosistemas que dan lugar a múltiples especies de plantas. Así, los estudios señalan que se pueden encontrar diez tipos de vegetación en México, los cuales son:

Selva húmeda: también conocida como selva perennifolia, es un bosque con árboles y arbustos que no pierden sus hojas. De esta forma, se pueden encontrar árboles de gran tamaño como la caoba, la ceiba y el hule; así como plantas y arbustos medianos y bajos, como lianas, trepadoras y bejucos. También se pueden encontrar más de 444 especies de orquídeas. Este tipo de vegetación comprende el 4,6% del territorio nacional y se puede encontrar en el sureste, mayoritariamente en el norte de Chiapas, el sur de Campeche y el sur de Tabasco.

Bosque de coníferas y encinos: también conocido como bosque templado, es la vegetación que crece en el clima semifrío y templado de las montañas, donde se encuentran bosques de encinos, pinos, cedros, ayarines, abetos y oyameles, de gran importancia para la economía mexicana. Se sabe que en el país hay hasta 35 especies endémicas de pino y otras 109 de encinos. Este tipo de vegetación comprende el 16,4% del territorio nacional y se puede encontrar en la Sierra Madre Oriental, la Sierra Madre Occidental y el Eje Neovolcánico.

Selva seca: esta vegetación tiene lugar en los climas cálidos con poca precipitación, como climas semisecos o subhúmedos. Esta vegetación suele estar conformada por árboles de entre cuatro y diez metros de altura y con un follaje espeso que, sin embargo, deja pasar la luz hasta el suelo, permitiendo el crecimiento de plantas bajas. Los árboles más característicos de la selva seca son el colorín, los mezquites, el cazahuate, los huizaches, los copales, los papelillos y el palo blanco; así como el nopal, el cactus gigante y el cardón. Este tipo de vegetación comprende el 10,9% del territorio nacional y se puede encontrar en Yucatán, Campeche, San Luis Potosí, Quintana Roo, Hidalgo, Veracruz y a lo largo de la costa pacífica desde Sinaloa hasta Chiapas.

Chaparral: este tipo de vegetación se puede encontrar en las regiones semiáridas y áridas de clima semiseco y seco, donde prevalecen los veranos secos y cálidos y los inviernos húmedos. Esto produce que se desarrollen arbustos como el charrasquillo, el encinillo, la manzanita, los chamizos y la rosa de castilla. Este tipo de vegetación comprende el 1% del territorio nacional y se puede encontrar en la Sierra de Juárez, la Sierra de San Pedro Mártir y el noroeste de Baja California.

Vegetación acuática: también conocida como hidrófila, es un tipo de vegetación donde crecen plantas desde el fondo de los pantanos, los estanques, los lagos y las orillas de los ríos hasta la superficie, como es el caso del tular, el manglar, el popal y las vegetaciones flotantes, subacuáticas y sumergidas. Este tipo de vegetación comprende el 1,1% del territorio nacional y se puede encontrar en regiones cercanas a los litorales donde llueve mucho, como Veracruz, Campeche, Tabasco, Nayarit y Sinaloa, ye n algunas partes de Baja California Sur, Baja California y Tamaulipas. De igual forma, se puede encontrar en los pantanos y las lagunas de orígenes volcánicos, como ocurre desde el centro de Jalisco hasta el norte de Michoacán.

Sabana: este tipo de vegetación se puede encontrar en las regiones con topografía plana o inclinada, cuyo suelo se agrieta y endurece durante las sequías, y se inunda durante las lluvias. Esto propicia el crecimiento de gramíneas perennes y arbustos de entre tres y seis metros y árboles como el cuatecomate, el jícaro, el nanche, el chilacayote, el chayote y la calabaza. En la sabana usualmente se cultiva caña de azúcar o se realizan actividades ganaderas. Este tipo de vegetación comprende el 0,08% del territorio nacional y se puede encontrar en la mayor parte de la costa pacífica, el golfo de Veracruz y Tehuantepec.

Pastizal:  este tipo de vegetación está compuesta principalmente por zacates y pastos, los cuáles se encuentran en regiones con climas secos y semiáridos, donde los días son extremadamente calurosos y las noches demasiado frías. Este tipo de vegetación es propio de las regiones con topografía plana u ondulada, cuyo suelo tiene altas concentraciones de roca volcánica. Los pastizales por lo general son utilizados para las actividades ganaderas. Este tipo de vegetación comprende el 4,9% del territorio nacional y se puede encontrar en el norte de México y las zonas más altas de las sierras, más allá de los 4.300 metros sobre el nivel del mar.

Vegetación de suelos salinos: también conocida como vegetación halófila, es aquella que se desarrolla en suelos con altas concentraciones de sales, como los litorales, las marismas y las lagunas costeras. Aquí se pueden encontrar cocoteros, palmas, arbustos, cactáceas y árboles como el zacate toboso, el chamizo, el romerito y la verdo laga.  Este tipo de vegetación comprende el 2,2% del territorio nacional y se puede encontrar en la meseta central y los estados de Nuevo León, Zacatecas, San Luis Potosí, Coahuila, y Chihuahua.

Bosque húmedo de montaña: también conocida como bosque mesófilo de montaña, es la vegetación que se desarrolla en las regiones montañosas donde se capturan los vientos húmedos del mar, lo que genera una lluvia persistente a lo largo del año. Así, esta vegetación cuenta con palmeras, helechos y árboles como el pino, el ciprés, el enebro, el abeto, el palo borracho, el tabaco, la campanilla, el poroto, el seibo, el junquillo y el algarrobo. Este tipo de vegetación comprende el 0,9% del territorio nacional y se puede encontrar en Michoacán, Jalisco, Morelos, Puebla, Ciudad de México, Veracruz, Hidalgo y la Sierra Madre Occidental.

Matorral: esta vegetación se puede encontrar en las regiones con precipitaciones escasas y climas semisecos, secos y templados. Por tanto, crecen arbustos espinosos, mezquites, magueyes y cactus, algunos de los cuales pueden tener una floración intensa y breve durante el año. Este tipo de vegetación abarca hasta el 29,1% del territorio nacional y comprende el Altiplano mexicano y las zonas desérticas de Sonora y Baja California.