Por qué

Conjunto de palabras conformado por una proposición (por) y un exclamativo o interrogativo (qué), el cual se tilda para diferenciarlo de la conjunción y del relativo “que”. Este conjunto tiene entonces la función de abrir una pregunta o una exclamación ya sea indirecta (con el interrogativo o exclamativo en otra parte de la oración diferente al inicio) o directa (con el interrogativo o la exclamación al inicio de la frase). Por ejemplo:

  • ¿Por qué estás así? (interrogación directa)
  • ¡Por qué bonita ciudad estamos paseando! (exclamación directa).
  • No entiendo por qué estás triste (interrogación indirecta)

Porque

Conjunción (palabra que enlaza proposiciones) átona (sin tilde) a la que suele darse dos usos:

Como enlazamiento causal, develando una explicación a un acontecimiento o un suceso. En estos casos, puede ser reemplazada por palabras como “ya que” o “puesto que”. Por ejemplo:

  • No fui al parque porque tenía miedo de salir = No fui al parque puesto que tenía miedo de salir.
  • No traje nada porque el supermercado estaba cerrado = No traje nada ya que el supermercado estaba cerrado.

También puede usarse como respuesta a una pregunta directa o indirecta:

  • —¿Por qué lo hiciste?
  • —Porque quiero.
  • —¿Por qué te dejas crecer el cabello?
  • —Porque es mi manera de expresarme.

Porqué

Sustantivo masculino que cumple la función de motivo, causa o razón de un fenómeno. En su escritura lleva tilde al final porque es una palabra aguda que termina en vocal (é). Al igual que todos los otros sustantivos, se le suele acompañar de un artículo y puede tener una forma plural (porqués

). Por ejemplo:

  • No soy capaz de descubrir el porqué de su comportamiento = No soy capaz de descubrir el motivo de su comportamiento.
  • Esto que está pasando tiene su porqué = Esto que está pasando tiene su razón.
  • Necesito una lista de los porqués por los cuales se cayó el edificio = Necesito una lista de las causas por las cuales se cayó el edificio.

Por que

Conjunto de una preposición (por) y un relativo (que) o una conjunción de subordinación (que). Para el primero, lo normal es anteponer un artículo al relativo. Por ejemplo:

  • Estas fueron las causas por las que se cayó el edificio.
  • ¿Estas son las cosas por las que pagaste tanto?
  • Este es el motivo por el que te traje aquí.

Para el segundo caso, se emplea entre una oración determinante y una subordinada. Así:

  • Sentía preocupación por que la ciudad pudiera caer a manos del enemigo.
  • Al final se decidió por que no fuera elegido.