Tipos de valores

¿Qué son los valores?

Los valores son las características del comportamiento de un sujeto que permiten la buena convivencia, como la honestidad, la lealtad, el respeto, el amor, la tolerancia, la solidaridad, la justicia, la sinceridad, equidad y la responsabilidad, entre otros. Dado que estos valores sirven para vivir en paz dentro de una sociedad, estos son promovidos por la misma como un comportamiento idealizado. Por esta razón los mayores, las generaciones pasadas y las religiones promueven los valores, ya sea de forma directa o metafórica, en forma de moraleja en distintas formas de narración, como los cuentos, las parábolas, las fábulas, las anécdotas, las películas, las series y los programas de televisión, etc. De tal forma que los valores son ideales de comportamiento que los miembros de una sociedad necesitan alcanzar para vivir en orden y armonía. Por la misma razón, las escuelas y los eventos públicos los enseñan y premian.

Pese a que los valores remiten a una idea universal de buen comportamiento, responden más a unas prácticas regionales y mutables, pues unos valores tienen más importancia en una época y en una sociedad que otros. Por ejemplo, en la antigüedad se promovían la valentía y el orgullo como valores fundamentales, pues las culturas de la época estaban en constante conflicto y necesitaban guerreros que las defendieran; sin embargo, ambos valores ya no resultan tan indispensables en el mundo actual, donde no se asumen los riesgos de antes. Otro ejemplo es el valor de la autonomía, promovido en una sociedad como la actual, en la cual se busca que las personas realicen emprendimientos. Este no era el caso de la época medieval, donde, por el contrario, se buscaban súbditos fieles y leales al rey.

¿Cuáles son los tipos de valores?

Los valores se pueden clasificar de muchas formas. Partiendo de un punto de vista filosófico, pueden clasificarse en:

• Valores morales: hacen referencia a los valores que conforman una conducta adecuada o no dentro de una sociedad. Así, cada sociedad tiene unos valores morales, expresados en tradiciones y reglas, que deben ser respetados por sus distintos miembros. Así, la moral responde a un comportamiento adecuado en sociedad.
• Valores éticos: hacen referencia a los valores que responden a las ideas del bien y del mal que cada persona tiene en su mente, independientemente de las reglas morales. De esta manera, se puede entender la ética como un comportamiento adecuado.

Partiendo de un punto de vista ecológico, pueden clasificarse en:

• Valores humanos: hacen referencia a los valores que deben tener los seres humanos para respetar y convivir entre sí, tolerando sus diferencias culturales y físicas. Es sobre estos valores que se fundan las relaciones interpersonales y las relaciones internacionales, posibilitando el intercambio entre diferentes culturas.
• Valores universales: hacen referencia a los valores humanos que deberían tener todos los seres humanos para poder convivir en armonía con el universo. De esta manera, estos valores trascienden las fronteras geográficas, los límites políticos y las restricciones culturas, pensando en una conducta que respeta a todas las personas y a todos los seres vivos, así como al planeta y al todo.

Partiendo de un punto de vista antropológico y sociológico, pueden clasificarse en:

• Valores personales: hacen referencia a los valores que posee cada persona, que pudieran ser adquiridos por la familia o la sociedad en la que se vive. De esta manera, de todos los valores existentes, cada persona considera que unos son más importantes que otros y actúa en consecuencia a este pensamiento. De tal forma que los valores de una persona definen su personalidad, sus ideas, sus opiniones y su forma de vida. Por supuesto, estos valores no son invariables, sino que se aprenden, olvidan o transforman dependiendo de las experiencias vividas.
• Valores familiares: hacen referencia a los valores que permiten la armonía entre el primer núcleo social al que se ve expuesto el ser humano: la familia. Dado que en estos casos la figura materna y paterna ostentan la autoridad, uno de los primeros valores que se enseñan a los niños es el respeto hacia los mayores. A este valor le siguen mucho más, que moldean el comportamiento del niño para que pueda finalmente salir y vivir por sí mismo en la sociedad sin sufrir tropiezos o desencantos.
• Valores culturales: hacen referencia a los valores heredados, de generación en generación, dentro de una cultura. De esta manera, los mayores legan sus costumbres a sus hijos y a los más jóvenes de la comunidad, asegurando la supervivencia de sus valores y de su forma de vida.
• Valores espirituales: hacen referencia a los valores promovidos por las religiones, que buscan moldear el comportamiento de las personas para que no solo estén en armonía con la sociedad, sino también con las leyes divinas y las autoridades religiosas, como los sacerdotes.
• Valores cívicos: hacen referencia a los valores que debe tener un ciudadano para vivir en armonía dentro de una ciudad. Cada urbe prioriza unos valores sobre otros dependiendo de su situación específica, por lo cual se puede ver que cada ciudad promueve un estilo de vida y un comportamiento distinto del de otra.
• Valores profesionales: hacen referencia a los valores que debe tener un profesional para llevar a cabo su trabajo de la mejor manera. Entre estos se destaca principalmente la responsabilidad, pues toda profesión implica un trabajo para la sociedad y para sus miembros. Aun así, cada profesión necesita de unos valores con mayor relevancia que otros. Por ejemplo, los funcionarios públicos deben tener un comportamiento honesto; mientras que los artistas deben ser creativos.
• Valores empresariales: también conocidos como valores corporativos, son los valores que promueve una empresa al interior de su estructura social, con la intención de que la imagen de la organización no se vea afectada ante la opinión pública, de que no haya disputas internas y de que no caiga la producción y la eficiencia.
• Valores sociales: hacen referencia a los valores que se deben tener para vivir armónicamente dentro de una sociedad específica, compilando así los valores cívicos, culturales, espirituales, personales, profesionales y familiares. Es decir, estos valores construyen un comportamiento que atraviesa todas las esferas de la vida social.