¿Qué es la conclusión?
La conclusión es la parte final de un texto investigativo, salvo por la bibliografía y las recomendaciones, en donde se evidencia si los objetivos fueron cumplidos exitosamente y de qué forma. Esta, o estas en el caso de haya varias conclusiones, tiene la función de recoger toda la argumentación del texto para crear, en una relación de causalidad, una afirmación final. De esta manera, la función de la conclusión en las investigaciones tiene un rol parecido al de la conclusión del silogismo. Así, a las siguientes premisas: “Todos los hombres mueren algún día” y “Sócrates es un hombre”, le correspondería la conclusión “Sócrates morirá algún día”. De forma homóloga funciona un texto investigativo, donde los argumentos que se han desarrollado a lo largo del trabajo arrojan un resultado evidente por su demostración empírica o lógica. Aunque normalmente se suele agrupar junto a las recomendaciones bajo la denominación de “conclusiones y recomendaciones”, no es obligatorio que se trabajen juntas o que no pueda haber conclusión sin recomendación.
Escritura de la conclusión
Sobre la extensión de la conclusión no hay un consenso, por lo que esta varía dependiendo de cada trabajo.
¿Qué son las recomendaciones?
Las recomendaciones es una de las partes finales de un trabajo investigativo, en donde el autor sugiere algunos elementos que podrían ser vistos desde otra perspectiva o en donde sugiere que se apliquen sus recomendaciones en la práctica o en la teoría futura. Aunque a veces se le suele agrupar junto a la conclusión bajo el título de “conclusiones y recomendaciones”, no es indispensable que todo trabajo investigativo posea recomendación alguna. Esta es usual en los trabajos de estudiantes universitarios que dejan las recomendaciones para ampliar su propia investigación en trabajos de posgrado o estudios posteriores.