¿Qué son las leyes de Mendel?

Las leyes de Mendel son un conjunto de afirmaciones acerca de la información genética que heredan unos organismos de sus progenitores. Estas fueron postuladas por el naturalista austro-húngaro Gregor Mendel entre 1886 y 1866; no obstante, su importancia no sería redescubierta sino hasta 1900. Estas leyes constituyen los pilares de la genética clásica, y son consideradas por varios científicos como uno de los grandes hitos de la ciencia, al mismo nivel de las leyes de Newton. Actualmente, el trabajo de Mendel es fundamental para el estudio de la biología dentro de la educación formal.

¿Qué son los genes dominantes y recesivos?

Dentro de la genética, se conoce como dominancia a las relaciones de dominación y recesividad entre los alelos o alelomorfos de un mismo gen. Si entendemos que un alelo es cada uno de los segmentos diferenciados en su secuencia que componen un gen y que producen determinadas funciones dentro del gen, podemos entender que la dominancia determina qué funciones y manifestaciones se impondrán sobre las otras en un gen y, por tanto, en un organismo. Así, por ejemplo, si un individuo homocigoto (dos alelos con la misma información) AA es verde y un individuo homocigoto aa es amarillo, se habla de dominancia cuando un individuo heterocigoto Aa es verde como AA, pues el alelo A domina al recesivo a. Estos conceptos son fundamentales para la genética clásica y las leyes de Mendel.

¿Cuáles son las leyes de Mendel?

Las tres leyes de Mendel son:

Ley de la uniformidad: también conocida como Primera ley o Principio de la uniformidad de los híbridos de la primera generación filial, afirma que al cruzarse dos líneas puras (AA y aa), los individuos de la primera generación de descendientes serán iguales tanto fenotípicamente (en su apariencia, serán de acuerdo al gen dominante) como genotípicamente (en su información genética, serán todos Aa

).

Ley de la segregación: también conocida como principio de segregación, afirma que la información genética de un individuo, contenida en un par de alelos, se divide durante la formación de los gametos (células reproductoras). Así, cuando se forma el cigoto por la unión del gameto del padre y del gameto de la madre, este contiene la mitad de la información de cada uno. Gracias a esto, puede saberse que, al cruzar dos individuos heterocigotos (Aa y Aa, en donde A es el alelo del guisante amarillo y a el alelo del guisante verde), genotípica y fenotípicamente se verán distribuidos de la siguiente forma: AA (amarillo), Aa (amarillo), Aa (amarillo), aa (verde). La proporción será entonces ¾ para obtener un guisante amarillo y ¼ para obtener un guisante verde.

Ley de la dominancia: también conocida como el Principio de la distribución independiente de los alelos o como la Segunda Ley según varios autores, afirma que la información genética heredada por diferentes alelos es independiente entre sí. Así, la transmisión de información de los A y a no interfiere con la información de los alelos L y l. La distribución entre individuos con distintos alelos es la siguiente:

 ALAlaLAl
ALAL-ALAl-ALaL-ALal-AL
AlAL-AlAl-AlaL-Alal-Al
aLAL-aLAl-aLaL-aLal-aL
alAL-alAl-alaL-alal-al